- Sociedad
- Guillermo Nina
28/10/2025.- La falta de diésel ahora afecta al recojo de basura en la ciudad de La Paz y la situación puede empeorar si el Gobierno no garantiza el abastecimiento del carburante al Sistema de Regulación y Supervisión Municipal (Siremu).
“Tenemos 41 unidades (camiones) destinadas sólo para el recojo de basura. Solo 10 trabajan por turno, 10 por la mañana y 10 por la tarde. En la noche son 20, reducimos la frecuencia de recojo porque no tenemos diésel y aplicamos en un plan de contingencia para garantizar el recojo de residuos”, dijo el director de Siremu, Willy Balderrama.
El funcionario explicó que habitualmente se trabajaba con todos los camiones de recojo en tres turnos, lo que ahora no sucede. “Los camiones ingresaban dos y hasta tres veces al botadero, ahora ya no”, complementó Balderrama, quien agregó que se prioriza el recojo de basura, por lo que se dejó de lado algunos servicios.
“Tenemos un cronograma de lavado de mercados para lo que tienen que salir todos los camiones cisterna, pero hemos dejado de sacarlos en algunos días, para no quedarnos sin diésel y hacer el lavado por lo menos una vez”, comentó.
La reducción de rutas significa, por ejemplo, que el camión de recojo pasaba cinco veces por un determinado lugar, ahora lo hace cuatro o tres veces por la falta de diésel.
“Lamentablemente, si bien se ha distribuido diésel a más surtidores de servicio para abastecer (a la población), se ha reducido la magnitud de dotación; ahora nos dotan alrededor de 2.500 litros nada más”, sostuvo la autoridad.
Reciben el 50 por ciento de la dotación total: el Siremu necesita 5.000 litros de diésel, por día, para cumplir cubrir los servicios municipales.
“Si bien tratamos de resolver el problema, obviamente se tiene que garantizar el recojo de la basura, por eso optimizamos todos los esfuerzos para cumplir la meta principal, que es un tema de salubridad para la ciudadanía”, acotó.
El Director del Siremu informó que la reducción de la dotación de combustible comenzó el año pasado y desde entonces se inició la aplicación del plan de contingencia, que se implementa en tres fases. “Por el momento estamos en la etapa dos”, explicó Balderrama, quien pidió paciencia a los vecinos en caso que los camiones no pasen por sus zonas o sus calles.
La prioridad son los mercados y hospitales de donde se tiene que recojer sí o sí los residuos que generan los comerciantes y las personas sometidas a tratamiento médico. Los residuos patógenos deben recibir un tratamiento especializado para evitar la propagación de males, virus y bacterias.