- Sociedad

- Wilma Pérez
24/12/2024.- A pala o con maquinaria, ya son ocho millones de litros de lodo que se lograron sacar del sector Santa Cecilia del barrio de Bajo Llojeta, donde hasta antes del 23 de noviembre vivían más de medio centenar de familias. La disminución de las precipitaciones permitió que los obreros del municipio de La Paz extrajera siete metros de barro, pero las autoridades y vecinos advierten que el peligro de un nuevo deslizamiento en el lugar se mantiene.
La Prensa visitó el lugar y evidenció que obreros del municipio, volquetas y un tractor trabajan para sacar la tierra. La labor es seguida atentamente por María A. “mi casita está al fondo, casi todo está lleno de barro, pero si no arreglan desde arriba, podemos volver a sufrir otra tragedia, necesitamos que metan más maquinaria, si no todo será en vano”, afirmó.
La noche del sábado 23 de noviembre, tras una fuerte lluvia el caudal del río Pasajahuira llegó hasta el sector Santa Cecilia arrastró el material que supuestamente había sido removido sin autorización de las autoridades por obreros de Inmobiliaria Kantutani. La mazamorra cubrió al menos 40 viviendas de la zona, además de ocasionar la muerte de Camila, una niña de cinco años.
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, advirtió que, pese al trabajo realizado, “la zona sigue siendo un sector peligroso, sigue siendo una zona roja”, por lo que pidió a la empresa Kantutani, primero ayudar a las familias damnificadas y evitar que las futuras lluvias puedan generar un nuevo deslizamiento que podría derivar en “un colapso similar o peor al que se registró”.
Aclaró que debido a temas judiciales tuvieron que replegar a los efectivos militares y la maquinaria, pese a que desde el inicio apoyaron a las familias con el traslado de algunos enseres y resguardo de las casas.
El alcalde de La Paz, Iván Arias, explicó que ante total ausencia de la empresa Kantutani, en el sector, la comuna implementó estrategias para mejorar la eficiencia de las labores de limpieza y colocado de bolsas de tierra para mitigar la fuerza del agua en la avenida de Los Sargentos.
“Hemos construido un río subterráneo que ha permitido sacar el lodo con mayor rapidez, también se estableció una ruta alterna para evitar dar vueltas innecesarias en el proceso de sacar la tierra y material de arrastre”, especificó.