• Sociedad
El proyecto tenía un presupuesto de Bs 49 millones, la CAF debía financiar el 60% y el 40% la Alcaldía de El Alto.
  • Wilma Pérez

10/12/24.- El proyecto de embovedado del río Lark’ajahuira, iniciado hace más de seis años en la ciudad de El Alto, es objeto de controversias y desafíos debido a las construcciones realizadas sobre el afluente, especialmente en el tramo sur. La Corporación Andina de Fomento (CAF) tenía previsto financiar la obra, que en su totalidad era Bs 49 millones, pero solo se ejecutó cuatro de los seis tramos. 

El secretario de Medio Ambiente de la Alcaldía de El Alto, Gabriel Pari, informó a La Prensa que la infraestructura enfrenta problemas desde 2017, oportunidad en que se paralizó el financiamiento, por lo que la construcción del embovedado quedó inconclusa, además de que se encontraron construcciones sobre el afluente.

“El proyecto fue originalmente financiado en parte por la CAF, pero el apoyo fue suspendido por culpa de las construcciones ilegales sobre el río. Por eso en el tramo sur no se hizo nada y en época de lluvias existe el temor de que el caudal del río no solo arrastre esas obras sobre el río, también las que están legalmente en la orilla”, dijo.
Según datos oficiales, el costo de construcción del tramo sur era de Bs 14,5 millones, pero a la fecha ese presupuesto se habría incrementado respecto al inicial.

Esta fase incluía obras importantes para mitigar riesgos de desbordes y mejorar las condiciones urbanas en los distritos afectados. 

Pese a la cancelación del financiamiento de la CAF, la Alcaldía buscó alternativas para continuar con la ejecución parcial del proyecto, aunque no se logró completar todos los objetivos inicialmente planteados.

“Son al menos diez casas en esta área, algunas de ellas con paredes que literalmente cuelgan sobre el río. Estas edificaciones han obstaculizado las labores de embovedado y generado riesgos inminentes de colapso en la infraestructura existente”, señaló Pari.

Lamentó que los loteadores oferten terrenos que no están aptos y que “en este caso hicieron desaparecer el río y los compradores no se fijan. Ahora está lloviendo fuerte y recién se percatan”.

En la actualidad y debido a la temporada de lluvias, las autoridades de la Alcaldía alteña continúan monitoreando el estado de los ríos de la región, incluyendo el Lark’ajahuira, para prevenir emergencias en esta época, a pesar de los desafíos relacionados con el embovedado en los tramos pendientes.