Delincuentes y cómplices
Un principio jurídico elemental establece que la comisión de delitos es personalísima, pero cuando una colectividad ampara a quien delinque se está en presencia no sólo de complicidad, sino de coautoría en las transgresiones a la ley.
Aun más, cuando las víctimas de aquellos hechos punibles son personas vulnerables, como son los niños de familias de escasos recursos económicos, las cosas son intolerables.