- Salud
- Wilma Pérez
22/11/24.- La falta de divisas en Bolivia pone en riesgo la salud de los pacientes, particularmente de los que padecen de enfermedades crónicas debido a que subió el precio de los medicamentos para el tratamiento de la diabetes, algún tipo de cáncer e insuficiencia renal, en algunos casos, por encima del 50%, aunque en las farmacias aseguran que solo es el 25%.
“Mucho ha subido la heparina, antes compraba a 30 bolivianos, ahora está a 70, eso es mucho dinero porque necesito uno para cada día. Antes nos daban gratis en la farmacia del hospital, pero como dice que no hay, me compro al día”, contó a La Prensa Andrés Mayta, paciente que padece de insuficiencia renal.
A decir del representante nacional de los pacientes renales, José Alcocer, los 6.700 enfermos con insuficiencia renal deben hasta prestarse dinero para comprar los fármacos porque en las farmacias privadas aumentó en más del 50% y en algunas ciudades no se consigue.
“Realmente estamos afectados todos con la falta de dólares, pues antes el Gobierno entregaba un lote, ahora es menos y no alcanza para todos, por lo que algunos se compran”, dijo.
El panorama es similar en el caso de los pacientes que padecen algún tipo de cáncer. Según una exautoridad del Ministerio de Salud, son unos 60.000 los pacientes que fueron diagnosticados con cáncer cérvico uterino, mama, próstata, huesos, entre otros males, que requieren de tratamientos para librar la batalla contra la enfermedad y el Gobierno entrega 44 fármacos.
La presidenta de la Asociación de Personas con Cáncer y Familiares Bolivia, Rosario Calle, lamentó que, pese al apoyo del Gobierno, algunas pacientes deben dejar este mundo con dolores, por falta de morfina o metadona, debido a que el stock es insuficiente para los que están en etapa terminal.
“En las farmacias no se compra como una tableta para el resfrío, se necesita la receta, la que se queda en el establecimiento. Dicen que son precios accesibles, pero el paciente terminal necesita muchas píldoras o inyecciones para cada día y la mayoría de los que están en el SUS (Sistema Único de Salud) son de bajos recursos, o sea, mueren sufriendo”, indicó.