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  • Susana Salinas

El 15 de marzo de este año,  una pequeña de seis años fue abusada sexualmente por el hermano de la portera de su escuela, de 24 años, en Cochabamba. En 2023, en Beni, un maestro vejó al menos a seis escolares de nueve años y cinco alumnos de secundaria violaron a un niño de 12 en una unidad educativa de Santa Cruz. La situación aflige.

Alejandra Cámara, del equipo de International Justice Mission (IJM) y directora del subproyecto Probos, reveló que 20 por ciento de los casos de abuso sexual en menores de edad se registra en ámbitos escolares, por lo que demanda “aulas más seguras”. De acuerdo con un estudio hecho por esta institución, “las adolescentes tuvieron relaciones sin consentimiento dentro de ambientes escolares”, o “se vieron forzadas”, como víctimas de las agresiones sexuales que se produjeron.

Cámara aseguró que este tipo de violencia en Bolivia tiene una prevalencia “bastante alta”. Según sus informes, en el año precedente, dos de cada 10 niñas, niños y adolescentes fueron víctimas de algún tipo de violencia sexual.
La activista Julia Velasco, coordinadora de Eco Jóvenes Bolivia, recordó los casos que, en su momento, fueron reportados por los medios del país, pero “la gran mayoría se queda en nada, sin repercusión ni seguimiento”. 

La reflexión surgió a propósito del Día de Lucha contra la Violencia Sexual en las Aulas, que se recuerda cada 14 de agosto bajo impulso de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y 
la Cultura (Unesco).
Carla Lorena Sandy Quinteros, funcionaria del Ministerio de Educación, informó que desde su despacho se busca optimizar las tareas de información, prevención y sensibilización sobre el particular.
Recordó que se elaboró y está en vigencia la Estrategia de lucha  contra la violencia en 
el ámbito educativo.