• Sociedad
Foto: Victor Gutierrez/La Prensa
  • HEIDDY QUIROGA

A días de la festividad de Todos Santos, en los diferentes cementerios de la ciudad de La Paz se harán presentes personas que cumplen u ofrecen diferentes oficios, que van desde la  limpieza de las tumbas, músicos, entre otros. 
Los limpiatumbas, o sepultureros informales, son trabajadores que desempeñan un papel crucial en estas fechas. Con escobas, baldes, brochas y jabón en mano, ellos se dedican a limpiar y pintar las lápidas para devolver el brillo a los nichos olvidados. Muchos de estos trabajadores suelen ser conocidos en los cementerios, ofreciendo sus servicios durante todo el año, pero en Todos Santos es cuando su labor tiene mayor demanda.  

PRECIOS Y SERVICIOS
“Los precios varían según el tamaño y el estado de las tumbas. El servicio básico de limpieza de una tumba pequeña o un nicho es 10 bolivianos, y si el trabajo incluye repintado y adornos adicionales el costo sube hasta los 50 bolivianos. Las tumbas que se encuentran en las áreas más antiguas y deterioradas requieren más tiempo y materiales, por lo que el costo puede alcanzar entre 130 a 300 bolivianos cuando se hace el colocado de lapidas con cerámica”, informó Mario Ramos, limpiatumbas desde hace 15 años. 
Además de limpiar, colocan flores o pequeñas decoraciones a pedido de las familias, quienes muchas veces no pueden acercarse con frecuencia a los cementerios. 
Ricardo Pacheco, también limpiatumbas, refiere que trabaja más de 30 años en el Cementerio General de la ciudad de La Paz.
“Para muchos de nosotros, es una forma de ganarnos la vida dignamente, y a la vez, nos sentimos parte de la tradición. Ayudamos a que las tumbas se vean lindas para recibir las almitas en su día”, enfatizó.

MÚSICOS. 
Desde músicos solistas hasta grupos más grandes de mariachis o huaycheños, las ofertas son diversas. 
Los géneros también varían, entre las tradicionales plegarias de Todos Santos, que son lamentos o cantos dedicados a los difuntos, hasta canciones más modernas o folclóricas, según las preferencias de la familia 
“Recorremos los pasillos del cementerio ofreciendo nuestros servicios de tumba en tumba, entonando canciones llenas de nostalgia y devoción. Una de las canciones más solicitadas en estas fechas es “Amor eterno”, “A la madre”, y una de las más juveniles “Yo te extrañare”, que con su letra melancólica refleja el dolor de la pérdida y la esperanza del reencuentro”, mencionó Jesús Quna, cantor de Los Pusy Chuymas. 
Los precios de las cantadas de los músicos pueden variar considerablemente, dependiendo del número de integrantes y el tipo de música que se solicita. 
“Un guitarrista solista puede cobrar entre 30 y 50 bolivianos, mientras que un grupo de huaycheño, de más de cuatro músicos, puede llegar a cobrar entre 250 hasta 500 bolivianos por una hora y media”, comentó Jesús Quna.
En el Cementerio General existen 11 músicos oficiales la mayoría son cantores con más de 60 años de vida. 
“Hay músicos que vienen de otros lados y al menos no nos hacemos problemas porque sabemos que al final la música es libre albedrío y trasmitir mediante la música que se van a volver a encontrar con sus seres queridos”, dijo Fabian Luizanga cantor de profesión de 62 años.