- Economía

- Gregory Beltrán
6/4/2025.- Desde 2019, las ventas de carne de res de Bolivia a mercados externos no dejaron de crecer hasta lograr en 2024 un récord que se acercó a los 246 millones de dólares, entre cárnicos y despojos comestibles.
El mayor precio de venta ocurrió en 2022, cuando el promedio de la carne exportada alcanzó un máximo de 8,62 dólares por kilogramo y, si se toma la cotización oficial, se habla de casi 60 bolivianos por kilo.
Sin embargo, en los mercados de La Paz el kilo se acerca a los 80 bolivianos, es decir que los bolivianos compran un producto con un precio mucho más caro del que se vende a otros países.
El precio de la carne de res en Bolivia no logra controlarse, pese a las medidas que implementó el Gobierno, como la suspensión de las ventas externas y la intensificación de los controles en las fronteras por donde sale una gran parte de este alimento por la vía contrabando a la inversa.
Según el Boletín Estadístico 2025 de la Cámara de Exportadores de Bolivia (CANEB), las ventas externas empezaron a incrementarse desde 2019, cuando se exportaba productos por valor de casi 25 millones de dólares y se importaba productos cerca de tres millones de dólares, lo que representaba ese año un saldo comercial favorable para Bolivia de más de 22 millones de dólares.
En tanto, en 2014, las exportaciones apenas superaban los $us 15 millones, 10 años después se vendió casi 246 millones de dólares, es decir que las exportaciones se multiplicaron por casi 16 veces en una década.
Respecto a los precios de venta al exterior, el documento observa “una relativa estabilidad entre 2014 y 2020, con el precio promedio de la carne bovina que fluctuó entre cinco y seis dólares por kilogramo. Sin embargo, a partir de 2020, se experimentó un notable aumento en los precios, alcanzando valores promedio cercanos a los siete dólares por kilogramo. Este incremento fue particularmente pronunciado en 2022, cuando el precio promedio de la carne exportada alcanzó un máximo de 8,62 dólares por kilo. Se destacó el mercado de Angola como el destino de exportación más valorado en precio”.
También se registra un fenómeno por la creciente demanda de despojos de carne, que para la CANEB “es particularmente inusual, ya que ha superado en ciertos aspectos la penetración de los cortes tradicionales de carne en varios mercados internacionales”.
En este sentido se observa que desde la gestión 2020 se observa un notable incremento en la diversificación de los destinos de exportación y que se mantuvo “de manera consistente”. Para 2024 se proyecta que el número de destinos de exportación se hubiera más que duplicado en comparación con 2020.
En 2021, “se observó un incremento significativo en el precio, pasó de un máximo de 1,94 dólares por kilo en 2020 a 3,35 dólares por kilo, más del doble del valor anterior. Esta tendencia alcista en los precios ha continuado de manera sostenida, hasta alcanzar valores que incluso superan los de los cortes cárnicos tradicionales, con precios que llegaron hasta 9,50 dólares por kilo en algunos casos”.
El documento destaca las exportaciones de productos cárnicos de la especie bovina que muestran un crecimiento permanente hasta alcanzar un valor de 136,05 millones de dólares en 2023, al mismo tiempo establece “que el 100 por ciento de estas exportaciones se origina en el departamento de Santa Cruz, lo que refuerza su posición como el principal centro de producción y comercialización de carne bovina”.
El incremento de las exportaciones muestra no sólo una mayor penetración en mercados externos, “sino también la efectividad de los procesos de mejora continua implementados sobre la cadena.
La optimización de los procesos de producción, transformación y comercialización, respaldada por infraestructura logística de alto nivel, ha permitido una mayor competitividad en los mercados globales”, según la CANEB.