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  • HEIDDY QUIROGA

Se modernizan las instalaciones de la Plaza  Vicenta Juaristi Eguino, pero la falta de vigilancia sigue siendo un problema debido a que es considerada una zona peligrosa.  Esta plaza fue inaugurada el 11 de diciembre de 1975, la denominaron Vicenta Juaristi Eguino, una valiente paceña y una figura de la Revolución del 16 de Julio de 1809.

Tras 15 años es que se realizan las nuevas refacciones que comenzaron en septiembre y ya tiene un avance del 50 por ciento. 

“Es un paso significativo hacía la revitalización de este lugar”, dijo Luis Miranda, responsable de la obra de la empresa Construcción Carrillo Flores. 

Explicó que para iniciar las obras de refacción se realizó la respectiva demolición de ciertas estructuras, se quitaron las baldosas y las rejas antiguas. 

“Ahora estamos en  la etapa del vaciado, el replanteo de las instalacciones eléctricas y la forestación de los espacios verdes”. 

Respecto al monumento escultórico se prevé que un grupo de restauradores de la Escuela Taller de Restauración realice una limpieza, informó Miranda. 

El espacio contará con una iluminación led, nuevas bancas con forma curveada y baldosas en el piso, además de un diseño en áreas verdes y la modernización de los quioscos. El objetivo es crear un espacio más atractivo y funcional para los vecinos y comerciantes, explicó Miranda.

La nueva plaza será, además, inclusiva, ya que se implementarán rampas para las personas con capacidades diferentes. 

De acuerdo con Tania Herrera, representante de las comerciantes de la plaza Eguino, hay un acuerdo con la Alcaldía que es el de modernizar los quioscos. “No estamos afectadas en nuestras ventas, mantenemos horarios, además modernizaremos los quioscos para estar al nivel de la plaza. Somos siete refresqueras y tres vendedoras de comida“.

OBRA.

En el caso de la plaza Eguino, la inversión es de 4.839.141,39 bolivianos que se ejecuta con los recursos de la Subalcaldía Centro.  

Se debe descatar que en esta remodelación intervienen la experiencia de dos obreras, una de ellas es Andrea Mayta, de 60 años, ayudante de afinador. Tiene 30 años de experiencia en embellecer los Barrios de verdad.  Mientras Carla García, de 36, realiza el boquillado de las baldosas.