- Sociedad
- HEIDDY QUIROGA
10/11/24.- “Unas compañeras que pertenecen al Hormigón hacían sus recorridos turísticos después de la pandemia y un día me dijeron: ¿por qué no vienes?, pero tenía miedo porque no hablo idiomas extranjeros y era tímida. Dijeron que eso no importaba, es así que comencé a interactuar con los turistas e incluso quiero aprender a hablar inglés”, cuenta Amalia Luca, ahora guía turista de Tours de Lustrabotas.
La oferta de este grupo es un recorrido turístico por los barrios y mercados populares del centro de la ciudad, a cargo de los icónicos ‘lustras’ del Hormigón con una duración de tres horas por el precio de 70 bolivianos por persona.
De acuerdo con el informe, este monto les permite solventar sus gastos, como pagar el alquiler, servicios básicos, alimentación e incluso la educación de sus hijos de quienes son papás o mamás.
PROYECTO
El Hormigón es una comunidad con varios programas, entre ellos, un medio escrito que promueve, permanentemente, talleres de redacción para los lustracalzados, y otorga trabajos alternativos, como el de guía de turistas el Hormigón Tours, también tienen becas y un restaurante ‘El Lustra Gourmet’ que dependen de la Fundación Arte y Culturas Bolivianas (FACB), que pronto cumplirá los 20 años de trabajo.
HISTORIAS DE VIDAS
“Tengo seis hijos, dos que están en la universidad y los demás en el colegio. No quiero que mis hijos repitan mi historia, aunque no crea, se sufre mucha discriminación, sobre todo ser mujer es una lucha diaria, por eso me animé a hacer turismo, pero sigo con mi labor de lustrabotas y otros trabajos eventuales para sostener a mi familia. Mi cajita es más que mi esposo porque me permite solventar a mis hijos”, relató entusiasta Luca mientras se preparaba para trabajar.
A su vez, Javier Calahumana más conocido como el ‘Mallku’, comentó “yo soy uno de los primeros que ingresó al Hormigón, vender los periódicos me salvó la vida. Cuando tenía 17 años consumía clefa, sin embargo, me rehabilité y ahora trabajo para sostener a mi hijo, también hago turismo“.
Luca agregó que “del lado de la pobreza, de lo popular, hay un lado bonito y misterioso en nuestra ciudad para los turistas extranjeros y locales”.
RUTA.
Generalmente, el recorrido turístico se inicia en la Estación Central del Teléferico, este medio visitó primero la Casa de los limpiacalzados, que se encuentra en cercanías de la plaza Alonso Mendoza.
Una característica de este sector, aclara el Mallku, “cuando nos ven tapados algunos se asustan, pero (los turistas) ya saben que este es nuestro uniforme”.
Este trayecto turístico nace el 2014, sin embargo, toma fuerza después de la pandemia con la alianza de la empresa Magri Turismo de Bolivia, con la finalidad de darles otras alternativas de trabajo a los “lustras”.
La primera parada es en el Cementerio General de La Paz para que puedan conocer a algunos de los personajes paceños y los murales que hay en el lugar. Luego hay un recorrido por el mercado de flores, los puestos de helados de canela y el mercado popular. En el Tejar visitan la “calle de los pescados”.
La siguiente parada de la ruta turística es el mercado Uruguay, luego pasan a ver un par de calles donde se venden sombreros y polleras. El tour concluye en la zona Max Paredes con la visita al mercado Rodríguez.