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Paisajes naturales, sitios arqueológicos, cultura, arte y tradiciones forman la oferta del departamento de La Paz para turistas extranjeros y bolivianos quienes buscan experiencias nuevas y autenticidad. El visitante puede encontrar diversas ofertas, servicios y actividades a lo largo del año.

Al respecto, el director de Conoce Bolivia, Iván Cahuaya, explicó que las 20 provincias del departamento tienen potencial turístico y gastronómico, pero admitió la falta vías de acceso e infraestructura de servicios para recibir y hospedar a los visitantes.

“Hay muchos municipios que han visto al turismo como una oportunidad económica, pero no la pueden consolidar al no tener las condiciones para atender al visitante. Hacen falta inversiones y políticas orientadas al desarrollo”, dijo.

A su turno, el director de Turismo de la Gobernación de La Paz, Percy Limachi, coincidió en que se carece de condiciones mínimas y políticas de promoción para explotar plenamente el potencial turístico del departamento de La Paz.

“Si bien se tiene todas las condiciones y comodidades en lugares ya conocidos por el turista, no se goza de esos servicios en los municipios que quieren dar a conocer su potencial”, se lamentó la autoridad.

Como alternativa, dijo, la administración departamental promueve círcuitos turísticos nuevos en alianza con municipios y comunidades. Este año se habilitaron nuevos destinos, como la ruta del Mallku, en los municipios de Achacachi, Batallas y Huarina; y la Tierra de Osos en Quime. En ese contexto, para el Director de Conoce Bolivia, las iniciativas deben ser acompañadas con políticas que viabilicen inversiones y programas de desarrollo local. “No basta con sólo dar a conocer o promocionar los atractivos”, sostuvo.

DESTINOS

El Illimani es el atractivo emblemático de La Paz, está ubicado cerca de la ciudad sede de gobierno y tiene la mayor altura en la Cordillera Real, y la segunda de Bolivia. Andinistas señalan que escalarlo es una experiencia satisfactoria.

El Titicaca, situado en el altiplano andino, es lago navegable más alto del mundo, pues está ubicado a 3.812 metros sobre el nivel del mar.

Está en la frontera entre Bolivia y Perú, y es testigo de la cultura de Tiwanaku y el Imperio Inca.

En sus aguas se encontraron reliquias de estas culturas que los pueblos prehispánicos ofrendaban a sus divinidades. En el norte, se oferta el turismo de aventura como el “biking” en el Camino de la Muerte entre Chuspipata y Yolosa, “rafting”, “zipline” y caminatas por las rutas prehispánicas que unen la cordillera con los Yungas y conocer las culturas afrobolivianas de Tocaña y Chicaloma.

“La Paz es uno de los primeros departamentos de Bolivia que ha generado flujos turísticos desde varias décadas, cuando el destino internacional más importante era el lago Titicaca, junto con la Cordillera Real”, mencionó Cahuaya.

A estos sitios se unió el destino Parque Nacional Madidi, en el norte tropical que, por condición de reserva de la biósfera, su fauna y flora, atraen visitantes. Estos atractivos están acompañados por otros destinos, como Yungas, Sorata, Coroico, Tiwanaku, Chiripa, Isla del Sol, Isla de la Luna, Irupana, Luribay, Quime, Charazani, Kurwa, Aucapata y las ciudades de La Paz y El Alto que por su topografía y urbanismo cautivan a los visitantes.

Por: Freddy Grover Choque