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De acuerdo con un recuento preliminar de la Alianza por los Huérfanos de Feminicidio de Bolivia, y el Observatorio de Exigibilidad de los Derechos de las Mujeres, entre el 1 de enero y el 17 de junio, 51 niños, niñas y adolescentes quedaron huérfanos por feminicidios en todo el país.
En Bolivia, 40 mujeres fueron víctimas de estos asesinatos. En Cochabamba, en 13 días hubo tres casos que dejaron en orfandad a nueve niños.
Según los datos, en Cochabamba 23 niños, niñas y adolescentes quedaron huérfanos y en Santa Cruz y La Paz 10 perdieron a sus madres.
Las secuelas del feminicidio sobre estos niños son graves. Muchos de ellos desarrollan fobias, miedo, ansiedad, falta de apetito, déficit de atención, desconcentración, descontrol de esfínteres, tristeza, ataques de ira y depresión, por lo que necesitan apoyo psicológico, pedagógico y de trabajo social durante largo tiempo.
El 11 de abril pasado, responsables de la oenegé presentaron un proyecto de ley para garantizar la atención, protección y reparación del daño sufrido por estos niños y adolescentes, sin embargo aún no recibieron una respuesta de la Asamblea Legislativa, que debe analizar el caso.
Por: Carmen Challapa