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  • Armin Copa

29/12/2025.- El Poder Ejecutivo puso en duda la legitimidad de las movilizaciones de la Central Obrera Boliviana (COB) al cuestionar los elevados salarios que percibirían sus principales representantes. Durante una conferencia en Santa Cruz, el ministro de Desarrollo Productivo, Óscar Mario Justiniano, instó a los trabajadores de base a interpelar a sus líderes sobre sus fuentes de ingreso y sus verdaderos lugares de funciones. La autoridad sugirió que los montos percibidos por la dirigencia podrían oscilar entre los 30 mil y 80 mil bolivianos, mientras el país enfrenta desafíos económicos.

Por su parte, el titular de Economía, Gabriel Espinoza, vinculó el accionar sindical con influencias de gestiones pasadas y criticó el silencio de estos sectores ante crisis previas. Según el ministro, la actual dirigencia no reaccionó con la misma vehemencia cuando se registraron desabastecimientos de combustible o incrementos inflacionarios en años anteriores. Bajo esta perspectiva, el Gobierno sostiene que las protestas contra el Decreto Supremo 5503 responden a una agenda política destinada a obstaculizar la reactivación productiva nacional.

La administración estatal advirtió que las medidas de presión fomentan la confrontación y perjudican la generación de recursos para el país. Los ministros coincidieron en que el liderazgo sindical actual se encuentra desconectado de las necesidades reales de la población trabajadora y busca proteger privilegios particulares. El pronunciamiento oficial ocurre tras un encuentro con sectores gremiales, donde se ratificó la intención de mantener las políticas económicas vigentes frente a las amenazas de bloqueos y paros.