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29/1/2025.- El presidente argentino, Javier Milei, celebró este martes la iniciativa anunciada por el Gobierno de la provincia de Salta para construir una cerca de 200 metros en una zona fronteriza con Bolivia, medida que generó el malestar de las autoridades bolivianas.

“Excelente el gobernador Gustavo Sáenz y las ministras Patricia Bullrich (Seguridad) y Sandra Pettovello (Capital Humano) trabajando en resolver problemas concretos de los salteños tanto en materia de seguridad como de asistencia”, escribió Milei en su cuenta en la red social X.

El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, informó sobre la licitación de un “alambrado perimetral” en el cruce fronterizo de Aguas Blancas, que limita con la ciudad boliviana de Bermejo. La estructura tendrá 2,5 metros de alto y se extenderá desde la oficina migratoria argentina hasta la terminal de buses, con el objetivo de frenar el flujo migratorio.

La Cancillería boliviana expresó su “preocupación” y señaló que los temas fronterizos deben tratarse a través del diálogo bilateral entre los Estados. Además, anunció que solicitará información oficial por los canales diplomáticos para evaluar posibles acciones.

Por su parte, el ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, minimizó la medida al señalar que la valla representa solo el 0,026 % de la frontera entre ambos países y afirmó que “tarde o temprano, todos los muros se caen”.

El gobernador Sáenz desestimó la reacción boliviana, indicando que la cerca se construirá dentro del territorio argentino y no representa una invasión a la frontera. La medida forma parte del Plan Güemes, presentado en diciembre pasado por la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, con el fin de combatir el narcotráfico, el contrabando y la trata de personas.

El Ministerio de Seguridad argentino también anunció el despliegue de 310 efectivos en áreas consideradas “críticas”, como el río Bermejo y la Ruta Nacional 34, conocida como la “ruta de la droga”. Bullrich defendió la iniciativa afirmando que el objetivo es reforzar el control en una frontera “descontrolada”.

Sáenz ratificó la construcción del cerco, asegurando que contribuirá a reducir riesgos y mejorar el monitoreo policial, garantizando una migración más ordenada y segura.