- Sociedad
- Aleja Cuevas
La movilización de marchistas que ingresó el martes al centro paceño generó 2.8 toneladas de basura a lo largo de su recorrido, informó la Alcaldía de La Paz. Un día antes se retiraron los contenedores de basura para evitar que sean utilizados como barricada.
El trayecto de los marchistas comenzó en El Alto y descendió por la Autopista, hasta su concentración por inmediaciones de la Terminal de Buses. A medida que las manifestaciones avanzaban, dejaban en su paso, latas, botellas de plástico y vidrio, bolsas con residuos de coca masticada y de comida, papeles, entre otro tipo de basura, que eran recogidas por cuadrillas de limpieza que se organizaron para hacer este trabajo de limpieza.
Willy Balderrama, director del Sistema de Regulación y Supervisión Municipal (Siremu), informó que, gracias a un despliegue coordinado de limpieza, las cuadrillas de Siremu, formadas por 20 personas en cada zona afectada, se apresuraron a recoger la basura acumulada en el camino de los marchistas.
“Desplegamos cuadrillas de 20 personas en cada zona para ‘bolsear’ la basura. Los camiones pasaron para recogerla, y en algunas áreas donde hemos implementado la ‘contenerización’ de carga lateral, se ha utilizado camionetas y otros recursos logísticos”, explicó Balderrama. Esta coordinación tuvo el objetivo de mitigar el impacto visual y ambiental de las marchas en la ciudad.
Como medida de prevención ante posibles enfrentamientos de grupos afines a Morales y al presidente Arce, el Siremu había retirado los contenedores del centro de la ciudad un día antes de la marcha. Los recipientes serán reubicados una vez se confirme la finalización de las movilizaciones, programada para el miércoles.
A la espera de la decisión de los marchistas, las autoridades locales mantendrán el operativo de limpieza activo y prepararán el retorno de los contenedores a su lugar habitual, garantizando así la limpieza y el orden en las calles de la ciudad.