- Cultura
- HEIDDY QUIROGA
“Mis T’ilinchos me dieron una casa para mis hermanos y posibilidades de sacar profesionales a mis cinco hijos. Estas miniaturas son hechas con pura greda y a mano, para mí este trabajo es un juego, donde creo mis animales y muñecos”, contó el maestro Walter Melendres al periódico La Prensa, mientras hacia una t’ilillama de arcilla.
PASIÓN POR EL ARTE
Las miniaturas son del tamaño desde dos hasta 10 centímetros.
Melendres dijo que en una hora debe realizar 20 animales, además de trabajar tres turnos desde las cuatro de la mañana hasta las 22:00 en su taller ubicado en Villa Natividad, Distrito 3 de la ciudad de El Alto.
“Cuando era niño a falta de juguetes en mi comunidad ‘Khunkhu Liki Liki’ en la provincia Ingavi de la ciudad de La Paz hacía sus muñecos de barro”, recordó y sus ojos brillaban ante su ejército de animales.
HISTORIA
‘TiliWalter’ nació en 1960, no aprendió su arte en academias o universidades. Su formación proviene de las manos de sus padres y del contacto íntimo con su entorno cultural.
Su inspiración nació de las formas, colores y relatos que caracterizan a la región de Wankane, tierra con una herencia tiwanakota viva en cada rincón.
También, dijo que, “junto a mis hermanos creabamos nuestros juguetes de greda, y quién diría que días y noches de jugar con barro, moldeado por las manos se convertiría en una empresa que exporta artesanías al mundo en la actualidad”.
A los 6 años ya era diestro y a los 12, profesional. Hacía en cantidades. A los 14, su papá le enseñó a hacer cerámicas tiwanacotas, ese mismo año quedó huerfano y se animó por este oficio para mantener a sus hermanos.
En 1983 se atreve a emprender, en un cuarto de alquiler comenzó su taller hace 41 años con diez dolares para la pintura acrílica y la greda la traía de su pueblo, ahora prepará sus obras para la feria de Alasitas del 2025, más de 500 unidades.
HOMENAJE
Este 15 de enero, a las 18:30, el Museo Nacional de Etnografía y Folklore (MUSEF) situado en la Calle Ingavi No. 916 esquina Jenaro Sanjinés, abre sus puertas en el patio principal para inaugurar una exposición que rinde homenaje a uno de los grandes maestros de nuestras raíces: Walter Melendres, el creador de los icónicos T’ilinchos.
La muestra reúne más de 50 piezas originales que reflejan la vasta trayectoria de Melendres, desde sus primeros trabajos hasta sus creaciones más recientes.
Esta exhibición marca el inicio del programa “Grandes Maestros de Nuestras Raíces”, una iniciativa del MUSEF que busca reconocer y visibilizar el trabajo de los artistas que, desde sus comunidades, mantienen viva la riqueza cultural de Bolivia.