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Una camisa blanca holgada con lentejuelas y un sombrero de mujer forrado con cuentas de mil colores son algunas de las prendas de caporal que guarda Lourdes Gómez, quien bailó en la fraternidad Urus del Gran Poder. Ella rememoró la historia de esta danza a partir de las formas y colores del vestuario que data de la década de 1970. En 1969, los hermanos Estrada Pacheco crearon el vestuario y junto a la banda Gran Pagador, de Oruro, ejecutaron el ritmo tan contagioso. A sus 66 años, Lourdes recordó, según relatos orales, cómo, entre 1968 y 1969, los nueve hermanos Estrada Pacheco fundaron la fraternidad Urus del Gran Poder. Por entonces, ella aún no se había casado con Eddy Pacheco, uno de los impulsores de la danza del caporal. En la actualidad, Lourdes vive en El Alto, donde guarda una colección de unos 30 trajes de caporal. En una visita que realizó La Prensa a su casa, Gómez mostró los atuendos para rememorar cómo eran los trajes de los Urus del Gran Poder, una fraternidad que intervino en el Gran Poder por primera vez en 1972. Un traje de tela charme de colores rojo y blanco, con camisa de mangas abombadas, calzados con polainas de cuerina y un sombrero de paja y lentejuelas. El segundo año, los danzarines escogieron un tono verde “vivo”, de tela popelina, y un pantalón negro de perlón. Aquel año empezaron a usar botas blancas con cascabeles. Las mujeres lucían polleras lilas y blusas amarillas. El tercer año, los varones usaron un traje albiverde y en la siguiente versión del Gran Poder, los varones impusieron las mangas abombadas más llamativas y las mujeres, botas blancas. En 1977, la fraternidad Urus del Gran Poder ganó el premio de Carmen Rosita. “Era un trofeo”, recordó la entrevistada. Durante los siguientes años, los trajes evolucionaron, algunos con más adornos, pero el rojo y blanco se mantuvieron como los colores de la fraternidad. Todos los trajes fueron exhibidos en 2021, cuando la Entrada del Gran Poder fue suspendida por la pandemia, que causó el fallecimiento de don Eddy, aunque antes de ser vencido por el Covid-19, mostró con orgullo su valiosa colección de trajes. Hace tres años, don Eddy perdió la vida, pero sobrevive su obra y la de sus hermanos, una danza que en forma insólita, folkloristas peruanos -si pueden llamarse así- pretenden presentar como suya en el sur de su país. La fraternidad Los Urus del Gran Poder viajó a Perú, Argentina y Ecuador para exponer la danza. “La gente aplaudía, para ellos era una danza extraña (el caporal)”, dijo Lourdes. También cumplió giras por el interior del país, en teatros y estadios. El ritmo del caporal es tan contagioso que Walter “Tataque” Quisbert, el gigante boxeador y luchador profesional, quien medía 2.25 metros, también formó parte de una tropa de caporales. Lourdes indicó que los más de 30 trajes seguirán en el baúl de los recuerdos y buena parte de ellos, posiblemente, serán parte de alguna exposición como en la Larga Noche de Museos. Por: Aleja Cuevas