- Cultura
- HEIDDY QUIROGA
17/1/2025.- Una faceta poco conocida de la cárcel de máxima seguridad de Chonchocoro, en el altiplano paceño, cobra protagonismo. En sus talleres, 250 privados de libertad dan rienda suelta a su imaginación, quienes fabrican una variedad de artesanías en tamaños grandes y pequeños todo el año. Sin embargo, se preparán para ser parte de la tradicional fiesta de la miniatura que se celebrará a partir del 24 de enero.
FIGURAS
Entre las obras que estarán disponibles en la feria, sobresalen los carros de hojalata, los llaveros de madera y los cuernos de reses, creados con una precisión notable por los internos. Pero es en los trabajos de carpintería y cuernería donde se refleja una destreza excepcional.
Los recursos económicos que se obtienen por la venta de los trabajos llegan a las familias de quienes las elaboran a lo largo del año y para diferentes ferias que se desarrollan en el país.
Wilfredo Blanco, responsable nacional de unidades productivas de la Dirección General de Régimen Penitenciario, explica que estos internos no solo participan en la elaboración de artesanías, sino que también se involucran en procesos de reinserción laboral. A través del programa “Centros Penitenciarios Productivos”, los privados de libertad tienen la oportunidad de acceder a mercados donde sus creaciones, tanto pequeñas como grandes, encuentran una salida.
Es así como, entre las rejas, la creatividad florece y, a través de las manos de quienes trabajan en estos talleres, se mantienen vivas las tradiciones y la artesanía boliviana.
CURIOSIDADES
El penal de máxima seguridad de San Pedro de Chonchocoro se encuentra en el municipio de Viacha, a 37 kilómetros de la ciudad de La Paz, a una altitud de 4.150 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, este complejo penitenciario que consideran uno de los más rigurosos del país, tienen mascotas felinas, Valerio Laura un preso de 35 años dijo que la compañia de sus gatos le hacen olvidar la soledad, “Este trabajo me quita el estrés, ya son 10 años en cuernería y nuestros gatos son nuestra familia, les cuidamos en nuestras posiblidades yo tengo dos, una se llama tiradora porque se lanzaba desde el taller de cuernería y la Blanda que es consentida come todo blando“.