• Economía
  • Gregory Beltrán

Si una persona intenta abrir una cuenta de ahorro en dólares o quiere comprar  divisas, la respuesta es que en “este momento” no se puede realizar esa transacción. No sólo eso, según recientes reportes de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi) a julio de este año el 99,4 por ciento de los créditos y el 90,7 por ciento de los depósitos en el sistema financiero están en moneda nacional.

“Es decir, el boliviano tiene una participación destacable tanto en la otorgación de créditos como en la captación de depósitos dentro el sistema financiero boliviano.”, se lee en un informe de la supervisora.
La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) presentó el balance del primer semestre y confirma que los depósitos en moneda nacional se situaron en 90,8 por ciento, “resultado que responde, por un lado, al aumento de 2.696 millones de dólares de depósitos en moneda nacional en el último año, dando cuenta de la confianza de la población; y por otra parte, la reducción de 478 millones de dólares en moneda extranjera, en un contexto de mayor demanda de dólares por parte del público”, anota.

El reporte de la Asfi señala que en el primer semestre los depósitos llegaron a 221.737 millones de bolivianos distribuidos en más de 15,7 millones de cuentas, “de las cuales, 1,01 millones fueron aperturadas en los últimos 12 meses”. Del total de depósitos 49,3 por ciento, es decir 109.261 millones de bolivianos corresponde a Depósitos a Plazo Fijo y 30 por ciento, es decir 66.429 millones de bolivianos, a cajas de ahorros, “entre las principales alternativas preferidas por la población boliviana”.

En criterio de la Asfi hay un “predominio de la moneda nacional: aunque los depósitos en moneda extranjera han disminuido en 3.527 millones de bolivianos entre julio de 2023 y 2024, este hecho es consecuencia de retiros motivados por el contexto especulativo relacionado con los dólares estadounidenses. Sin embargo, los depósitos en moneda nacional crecieron significativamente en 18.161 millones de bolivianos, subrayando la preferencia del público por la moneda boliviana, un indicador de estabilidad”.

MÁS DATOS.

El informe de Asoban señala que tanto el número de prestatarios como la cantidad de cuentas de ahorro en el sistema bancario registraron crecimiento, además de avances en materia de bancarización “con efecto en la inclusión financiera”.

En este sentido, el número de prestatarios se situó en 1.560.916, con un aumento de 50.143 en un año.
En algo que no coinciden la Asociación de Bancos y la Asfi es en la mora, es decir el retraso en el pago de créditos bancarios que, si bien se sitúa por debajo del promedio regional, hay una discrepancia respecto a la perspectiva. Según Asoban, la cartera en mora alcanzó a 971 millones de dólares y el índice de morosidad llegó a en 3,4 por ciento “manteniendo la tendencia al alza que proviene principalmente de la mora reprogramada”. Responsables de la entidad reguladora aseguran que la mora está controlada y suficientemente cubierta, debido a que el índice “se mantiene en un controlado 3,5 por ciento, por debajo del promedio regional de 3,6 por ciento. 

Es importante señalar que Bolivia aplica un criterio más estricto al calcular la mora, considerando retrasos superiores a 30 días, mientras que el estándar internacional es de 90 días. Además, las previsiones para cubrir la mora alcanzan un sólido 124 por ciento, asegurando que las entidades están preparadas para manejar cualquier deterioro en la cartera de créditos”. Algo más, la Asfi indica que el sistema financiero no sólo ha mostrado estabilidad en la mora, “sino que otras variables clave también reflejan un desempeño positivo”, como por ejemplo el crecimiento anual de la cartera de créditos anual del 4,1 por ciento y la liquidez que llegó a 70.896 millones de bolivianos, cubriendo el 65 por ciento de los depósitos a corto plazo”, las utilidades llegaron a 1.033 millones de bolivianos, con un incremento de 116 millones de bolivianos.