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  • Aleja Cuevas

Unos 10 actores y músicos alteños del colectivo Tawayapu recorrieron el sudoeste de Francia  y otras ciudades de España con la música andina amazónica de Bolivia. Lo hacen a través del proyecto musical Ispaya y dos obras de teatro que abordan los conflictos de un preste y la de tres mujeres migrantes que llegan a la urbe alteña. 

“Viajamos nueve, de 25 jóvenes, niños y adolescentes que forman parte del colectivo Tawayapu. En Francia se integró la hermana Shezenia, con ella somos 10”, contó el viernes Maya Cahua, desde el país europeo.
Reyna Mamani, del colectivo, informó que este viaje es un trabajo colaborativo entre D’un Sud al Otro (Francia), CreArt Educación Comunitaria (España) y Tawayapu movimiento artistico (Bolivia). 

La caravana de actores, actrices y músicos partió a Francia los primeros días de este mes. 
“Es una gira planificada ante una necesidad de compartir el trabajo y romper fronteras”, apuntó Cahua.
Shezenia Laiqa, quien vive en Francia junto a Baptiste Monguis, su compañero, explicó que esta propuesta busca compartir experiencias, estrategias de trabajo territorial y de fortalecer las acciones que se realizan en El Alto, además de visibilizar el trabajo de Tawayapu en la una de las ciudades más jóvenes de Bolivia. 

“Junto con Baptiste buscamos diferentes espacios de trabajo cultural, artístico educativo”, expresó Laiqa.
La caravana que se denomina “Caravane des Andes aux landes” visitó al menos 15 ciudades del sudoeste de Francia, entre ellas, Duhort Bachen, Ju-Belloc, Villeneuve de Marsan, Pau, Bonnegarde, Larbety y este domingo estará en Anglet. 

Liqa reiteró que el objetivo de esta travesía es vincular estas experiencias. “Entonces, estaremos tres semanas en Francia, una semana en Barcelona y cinco días en Madrid”, detalló.
Aclaró que es una caravana muy particular, porque es autosubvencionada. “Con todas las presentaciones, talleres y propuestas, estamos pagando tanto los billetes de avión que permiten hacer este puente, entre Bolivia, Francia y España, y también los gastos logísticos, los transportes y la alimentación”. 

Este intercambio cultural se facilita a través de la hospitalidad de las comunidades, que albergan y promueven así un encuentro enriquecedor.

TRES PROYECTOS

La caravana artística lleva tres propuestas: el proyecto musical Ispaya, que fusiona tonos andinos y amazónicos, y dos obras de teatro, la primera es Victoria de El Alto, narra la historia de tres mujeres indígenas migrantes, aymara, quechua y guaraní, que comparten sus experiencias de vida en una ciudad emergente. “Se aborda lo cotidiano, las injusticias, las violencias y los micromachismos”, explicó Cahua. 

La segunda obra, El Preste trata sobre las festividades, a partir de una maldición que se cierne sobre una celebración donde lo económico prevalece sobre el verdadero compartir del preste con su comunidad.   
Además, el intercambio cultural incluye talleres de música andina y la fabricación de instrumentos. 

“Se ha tenido 25 intervenciones, entre presentaciones, talleres, charlas y debates”, resumió Mamani. 
Lucero Yucra es la primera vez que viaja a Europa, en especial a los campos franceses, ”es lindo estar en este lado. Me siento fortalecida porque hay mucha gente dispuesta a apoyar estos proyectos”.