• Sociedad
En la localidad paceña, al menos 1.600 familias agrícolas están perjudicadas.
  • Susana Salinas

20/11/24.- Los efectos de las lluvias, entre el fin de semana y ayer, dejaron al menos 1.600 familias agrícolas afectadas en Luribay (La Paz). También se registraron inundaciones en algunas regiones de Cochabamba, Tarija y Beni. 
La alerta naranja que emitió el Servicio Nacional de Metereología e Hidrologría (Senamhi) rige hasta hoy, con previsión de lluvias moderadas y fuertes en Santa Cruz, Cochabamba, Beni, Pando y La Paz.

Aunque se esperaba una precipitación pluvial de entre 60 y 90 milímetros por metro cuadrado, en Luribay, de acuerdo con sus autoridades, la situación “se complicó con la crecida del río”.

El agua arrastró la producción de tomates, choclos, papa y otros productos, que estaban en el borde del río Luribay y también se llevó unos dos toros, contó Efraín Mamani, concejal municipal de la localidad, ubicada en la provincia Loayza.

La lluvia del domingo, cayó por cuatro horas e hizo caer un muro de contención en la comunidad de Bravo Alto y bloqueó el camino que conecta a las comunidades con el centro poblado luribayeño. Ayer, con la ayuda de maquinaria pesada, se realizaron trabajos para habilitar el acceso. 

“Hoy (ayer) teníamos una feria y no pudieron pasar ni los autos”, explicó Mamani, luego de resaltar que la alcaldía ya no cuenta con recursos para atender las emergencias.

En esta oportunidad, el río creció hasta cinco veces más y a su paso se llevó los defensivos, de arena y cemento. La parte afectada se concentra en la comunidad Catavi, de la subcentral Cutty.

La tarde de ayer, las autoridades elaboraban una ley municipal para declarar emergencia en el municipio, para pedir ayuda a la Gobernación de La Paz.

Tarija, Beni y Cochabamba también registran daños por lluvias torrenciales. En la ciudad beniana de Trinidad, el barrio 13 de abril quedó inundado, el agua ingresó hasta las viviendas. Vehículos y motocicletas no pudieron circular por la cantidad de agua.

En Cochabamba, la intensa lluvia que cayó entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, provocó el taponamiento de alcantarillas. Varias calles y avenidas, hacia el sur de la urbe, quedaron totalmente anegadas.