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  • Freddy Grover

Al menos 70 familias de la comunidad Seke Jahuira, municipio paceño de Viacha, abandonaron sus propiedades y cultivos debido a la contaminación de ríos con cianuro, un químico altamente tóxico, vertido por al menos 23 empresas mineras que operan en ese sector. 

“En el lugar antes habitaban 85 familias que se dedicaban a la crianza de ganado y la producción de leche. Hoy sólo habitan 15, estas familias no tienen donde ir y se ven obligadas a vivir en el lugar pese a los altos niveles de contaminación”, reveló ayer la asambleísta departamental Samanta Coronado.

Informó que, junto a autoridades de la Gobernación de La Paz, Ministerio de Medioambiente, Alcaldía de Viacha y de la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM), realizaron el lunes una inspección a la comunidad, labor que permitió evidenciar la magnitud del daño en los ríos Seke Jahuira, Pallina y Katari.

La contaminación, dijo, afecta pastizales, forraje, cultivos y provocó la muerte de animales, además de causar enfermedades entre los pobladores, como el cáncer.

“Es un lugar árido, la contaminación puede sentirse fácilmente en el ambiente, el viento dispersa las partículas de cianuro y de los minerales. En el recorrido se evidenció galpones con mineral y diques de cola sin ningún tipo de tratamiento”, denunció.

RESPONSABILIDAD

El secretario de Derechos de la Madre Tierra de la Gobernación paceña, Luis Saucedo, señaló que las mineras que operan en Viacha no cuentan con licencia ambiental y que trabajan con permisos otorgados por la Alcaldía.

Ante ello, el asambleísta departamental, Israel Alanoca, afirmó que la responsabilidad recae en el alcalde, Napoleón Yahuasi quien, a pesar de tener conocimiento de las actividades mineras no asumió acción alguna.

Informó que formará un equipo multidisciplinario en salud para asistir con especialistas a los pobladores que están obligados a permanecer en el lugar.

Además, se pedirá al municipio un informe de mortalidad de personas y animales en los últimos años.