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10/1/2025.- En un movimiento que refleja la creciente alianza entre Irán y Venezuela, altos funcionarios iraníes han adquirido propiedades en territorio venezolano mientras el régimen de Nicolás Maduro habría ofrecido asilo político a miembros de la élite iraní en caso de crisis interna. Esta relación bilateral incluye cooperación militar y económica que podría afectar la estabilidad regional.
Irán ha establecido una base de desarrollo de drones en la base aérea El Libertador, donde se entrena a personal militar venezolano en el manejo de modelos como el ANSU-100, ANSU-600 y ZAMORA V-1. Estas unidades tienen capacidades de ataque y reconocimiento, lo que representa un avance en la capacidad militar de Venezuela. Además, Irán planea expandir la venta de estos drones a otros actores en América Latina.
Desde 2020, la Fuerza Quds, unidad de élite de la Guardia Revolucionaria de Irán, tiene presencia en Venezuela. Delegaciones iraníes han sostenido reuniones con altos funcionarios del régimen venezolano, fortaleciendo lazos económicos mediante transacciones de oro a cambio de petróleo iraní, eludiendo sanciones internacionales. Este oro ha sido vendido en mercados de Turquía y Oriente Medio, generando fondos para actividades consideradas terroristas por algunos países.
El embajador de Irán en Venezuela, Hojat Soltani, centraliza las operaciones iraníes en el país, incluyendo tecnología, petróleo y defensa. La alianza entre ambos países refuerza su posición frente a sanciones internacionales, mientras plantea riesgos para la estabilidad de América Latina.