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Son las 08:30. Aún es temprano, pero a medida que pasan los minutos, el olor fétido que emerge de un canal que atraviesa a través de la zona San Simón, se hace cada vez más insoportable. Hace 30 años era un “bosquecillo, ahora es una zona de paso, en las faldas del cerro de la ladera este, donde hay más de 200 viviendas.

Federico Cuevas, de 63 años, quien vive hace más de dos décadas en esa zona gustoso aceptó dialogar, aunque no es fácil por el intenso olor nauseabundo y prefiere taparse la nariz con la manga de su chompa.

Afirma que “a partir del mediodía es peor”, porque comienzan a bajar las aguas servidas desde la zona 24 de Junio, que está en la parte superior de ese sector, y pasan justo por medio del sector. Solo la mitad del río, fue embovedado; una parte, durante la gestión del alcalde Juan del Granado y con cooperación española, y la otra hace 10 años, labor realizada con recursos propios aportados por los vecinos.

San Simón fue fundada hace más de 50 años y es parte del Distrito 14 de La Paz, en el macrodistrito San Antonio, adonde sólo se llega a pie —tras subir empinadas cuestas de piedra o gradas de cemento—, o en vehículos de una línea de trufis que recorren esporádicamente por el lugar.

“El resto del canal está abierto y si bien ahora tenemos problemas por el olor y la contaminación, en época de lluvias es peor, porque se desborda y el agua afecta a muchas casas (…). La gradería se vuelve río”, relató Víctor Téllez, otro vecino, mientras muestra una especie de “dique” que un vecino debió construir para que el agua no anegue su vivienda.

Hace 20 años sólo había sendas en esa zona y los vecinos, “con pala y picota”, abrieron caminos de tierra y piedra. Fue durante la gestión del alcalde Luis Revilla que se ejecutó un pequeño trayecto de enlosetado, en la calle 4, la vía principal de esa zona, por donde ahora recorren algunos trufis.

Las áreas verdes también están en riesgo, pues de manera sorpresiva aparecen “loteadores, quienes con planimetría en mano ofrecen terrenos”, fustigó Román Chayña, otros de los vecinos fundadores del barrio.

En la zona hay cerca de 220 viviendas y tiene 150 mil bolivianos de POA, por lo que en algunas gestiones los dirigentes vecinales hicieron “trabajo mancomunado” con otras zonas, no obstante, con el paso de los años, no se pudo continuar ese mecanismo de coordinación.

Desde el centro paceño, se tarda 30 minutos en llegar hasta la zona en minibús, y 20 minutos más a pie hasta la calle principal de la zona.

Los vecinos afirman que el lugar es estable, pues “no hay rajaduras”, además que cuenta con planimetría aprobada por las autoridades ediles, por lo que demandan una mayor presencia de personal municipal para dar mantenimiento al “embovedado incompleto”, que recorre por la calle 5 de Marzo.

“Muy de vez en cuando vienen algunos obreros y creo que aquí deberían venir ingenieros para hacer evaluaciones profundas, antes de la época de lluvias que inicia en noviembre”, demandó Chayña, quien alertó de los problemas que podrían sobrevenir por el agua.

Por: Luis Mealla