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Lula volvió a Bolivia después de 15 años y lo hizo por todo lo alto, llegó junto a sus ministros para firmar varios acuerdos y proyectos como la construcción de una planta de fertilizantes de nitrógeno entre Corumbá, Brasil, y Puerto Quijarro, Bolivia. Se calcula que entre un tercio y la mitad de la producción de alimentos para la humanidad depende directamente de la aplicación de fertilizantes nitrogenados, lo que demuestra el interés que tiene el Mandatario brasileño por fortalecer la integración entre ambos países. Después de participar en la Cumbre de presidentes del Mercado Común del Sur (Mercosur), que se realizó en Paraguay, Luiz Inácio Lula da Silva llegó la noche del lunes a Santa Cruz de la Sierra junto a gran parte de su gabinete y alrededor de 100 empresarios quienes participaron en el Foro Empresarial Bolivia-Brasil. Luego de una reunión privada con su par boliviano Luis Arce, Da Silva sostuvo un encuentro ampliado con los ministros de ambos países para, posteriormente, suscribir cuatro acuerdos de cooperación referidos a enfrentar la trata de personas, delitos conexos, protección a migrantes y lucha contra antidrogas. Estos acuerdos fueron firmados por la ministra boliviana de Exteriores, Celinda Sosa, y su homólogo brasileño, Mauro Vieira. Ambos presidentes aprovecharon la oportunidad para firmar acuerdos de lucha contra el contrabando y capacitaciones para enfrentar el crimen organizado. En materia de salud, decidieron firmar un protocolo de intención sobre el acceso recíproco entre ciudadanos de ambos países. En el campo energético, se firmaron acuerdos de explotación de los recursos naturales y recursos energéticos, así como los programas de transición de energía. Tampoco dejaron de lado el aprovechamiento eléctrico, la comercialización de urea, así como industrialización de minerales metálicos y no metálicos. Luego de la firma de acuerdos, el Mandatario brasileño dijo que uno de sus propósitos es que junto a otros países de la región dejen de ser tratados como países en desarrollo. Si bien las naciones sudamericanas no cuentan con la riqueza tecnológica de otros países, la naturaleza brindó una riqueza que el mundo necesita hoy, aseguró. “Hoy tenemos que ofrecerle al mundo algo que no tiene y eso es lo que el pueblo de Bolivia espera de Brasil y lo que el pueblo brasileño espera de Bolivia”, dijo Lula en un discurso emotivo, como cuando dirigía al Sindicato de Metalúrgicos de Brasil. Junto a Arce decidieron conversar por teléfono cada dos meses, para solucionar cualquier impasse que podría presentarse en los ministros. Uno de los proyectos que tienen en mente ambos Estados es avanzar para “lograr una integración marítima” entre el Pacífico y el Atlántico, sea por ferrocarriles o por carreteras.

Respecto a la relación gasífera, Lula reconoció que “Bolivia sigue siendo el principal proveedor de gas natural de Brasil”, por lo que propuso ampliar las inversiones a fin de aumentar las exportaciones de energético.

Por su parte, el presidente de Bolivia, Luis Arce, agradeció la visita de Lula y recordó que cuando se encontraron en la campaña electoral en San Pablo, “nos dijo que si ganaba iba a venir a Bolivia y ha cumplido su promesa”.

Agradeció el papel que jugó Brasil para que Bolivia forme parte del quinto bloque comercial del mundo, como es el Mercosur, y reiteró su decisión de integrar a Brasil en la Comunidad Andina, organismos del cual forma parte el país.

Destacó el interés existente para “desgasificar” las relaciones entre ambos.

“Hablar de la relación de Brasil con Bolivia aquí en nuestro país era el gas, hermano presidente. Hoy gracias a la visión que tiene Brasil, ahora la cabeza de usted, sabemos que Bolivia no es solamente gas”, dijo.

Coincidió con su colega en la necesidad de vincular a los países de la región, como la construcción del puente binacional sobre el río Mamoré, proyecto que beneficiará a Beni y Pando, en Bolivia, y a Rondonia y Acre en Brasil. “Hemos avanzado en muchas relaciones entre nuestros países, pero la integración física es la que menos hemos enfatizado como región, celebro porque queremos formar parte de esa integración. Bolivia está en el corazón de Sudamérica, Bolivia es el enlace entre el Pácifico y el Atlántico. Bolivia forma parte de esta América Latina, de esta América del Sur que nosotros claramente somos un jugador importante para que todos nos integremos”, afirmó Arce.

Recordó el proceso de industrialización que lleva adelante su Gobierno y solicitó compartir la experiencia brasileña para desarrollar en Bolivia la producción de fármacos. “Queremos entrar a tantas industrias en las que Brasil tiene gran experiencia y nos podemos complementar”, acotó.

Luis Arce dijo que es importante acelerar los tiempos, “hay que apurarse porque la crisis climática, la crisis alimentaria, en fin, todas las crisis del sistema capitalista se están dando ya simultáneamente y estamos verificando ya los efectos en nuestra América Latina”, finalizó el Presidente.

Por: Gregory Beltrán