• Sociedad
  • LA PRENSA

Al cumplirse ayer el segundo día del paro de 96 horas declarado por los profesionales de salud, la Unidad de Emergencias del Hospital de Clínicas de La Paz debió ser aislada por haber recibido a un paciente sospechoso de padecer arenavirus.

Los enfermos que requieren una atención inmediata fueron derivados a otros nosocomios para evitar una posible propagación del mal o enviados a sus domicilios.

“Emergencias cerrada y aislada por la presencia de paciente con arenavirus, fiebre hemorrágica. Se prohíbe el ingreso de familiares”, se lee en el cartel que inicialmente fue colocado en la puerta de ingreso a esa unidad, pero luego se lo cubrió con las palabras “con arenavirus, fiebre hemorrágica”, para no alarmar a los familiares de los internados y personal que trabaja en el lugar.

La cuarentena del personal, pacientes y algunos familiares que estaban en esa Unidad se mantendrá hasta que el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop), de Santa Cruz envíe resultados del análisis de las muestras enviadas para analizarlas.

El viceministro de Vigilancia Epidemiológica, Max Enríquez, indicó que en el nosocomio se cumple el protocolo de medidas de bioseguridad cuando se presentan enfermos sospechosos, de portar males contagiosos. “Corresponde el aislamiento de las personas para evitar el contagio al entrar en contacto con algún fluido. Hay una alta sospecha que podría tratarse de fiebre amarilla. Las muestras se enviaron al Cenetrop”, indicó.

A esta situación se suma el paro que los profesionales médicos cumplen desde el lunes, en rechazo a la jubilación a los 65 años. Entretanto, cirugías y exámenes de laboratorio se acumulan en todo el Complejo de Hospitales de Miraflores en La Paz.

La medida de protesta se cumple en todo el sector público del país, pese al anuncio de descuentos que realizaron autoridades nacionales.

Por: Wilma Pérez Soliz