- Economía
- Sessy Gutierrez
La Cámara Nacional de Comercio (CNC) destacó que Bolivia atraviesa un período de creciente inestabilidad económica, que podría derivar en una crisis social y política.
Uno de los principales problemas mencionados es la falta crónica de combustibles, lo que podría interrumpir las actividades productivas y comerciales, afectando el abastecimiento a la población. Además, la escasez de divisas está dificultando la importación de bienes esenciales y de insumos necesarios para el aparato productivo nacional.
Otro aspecto preocupante es la disparidad entre el tipo de cambio en el mercado paralelo y el tipo de cambio oficial, lo que está elevando los precios y podría desatar una inflación sostenida en la economía. A septiembre de 2024, la inflación acumulada alcanzó un 5,53%, superando el 3,6% proyectado para el año.
Los bloqueos que interrumpen el tránsito en las carreteras del país están generando graves problemas para las empresas. Estas interrupciones deterioran las mercancías en tránsito, rompen cadenas de valor y ponen en riesgo las exportaciones, lo que puede afectar futuros contratos internacionales. Hasta agosto de 2024, las exportaciones bolivianas cayeron un 20%, mientras que las importaciones disminuyeron un 14%, lo que generó un déficit comercial de 378,6 millones de dólares.
La CNC enfatizó que los bloqueos vulneran el derecho constitucional a la libre circulación, agravando una situación ya compleja para el sector privado, que en los últimos años ha enfrentado inestabilidad política, la pandemia, y la escasez de dólares y combustibles.