El diésel ingresará por mar y tierra al país para abastecer el mercado interno

La desesperación por la falta de diésel en Bolivia obligó a los transportistas de Oruro a declarar un paro con bloqueo de caminos que duró sólo por algunas horas, mientras en La Paz sus compañeros protagonizaron una medida de fuerza en El Alto, molestos porque el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, no asistió a una reunión para tratar precisamente este tema.

El malestar se originó en las condiciones climatológicas en los puertos, principalmente Arica, que evitaron descargar más de 40 millones de litros del combustible. Se espera que este fin de semana mejoren las condiciones para que atraque el buque cisterna y se sume a las importaciones de diésel que se transportan desde Paraguay, Argentina y Perú.

Los factores climáticos impidieron también que las navieras suspendan viajes a Puerto Suárez, Santa Cruz, para transportar el combustible debido al bajo nivel del calado en la hidrovía. Autoridades nacionales señalaron que estos dos factores explican la disminución de los despachos, principalmente de diésel, en un 22 por ciento esta semana. Dorgathen informó que a este panorama se sumó un bloqueo en Yacuiba, donde hay 45 camiones cisternas con diésel en espera de seguir viaje.

“Tenemos saldos bajos de diésel. Es por eso que tenemos la precaución de esperar la descarga del producto en Arica. Sin embargo, en gasolina tenemos saldos suficientes para garantizar la demanda del mercado interno”, indicó, por su parte, el vicepresidente de Operaciones de YPFB, Ariel Montaño.

Explicó que hay cuatro buques con casi 160 millones de litros de diésel que esperan ser descargados en Arica, cuyo contenido ya fue pagado por la estatal petrolera. Este tema debó analizarse ayer entre dirigentes del transporte y ejecutivos de YPFB, después del encuentro que sostuvieron con las autoridades del Ministerio de Economía, pero la ausencia de Dorgathen hizo que los transportistas decidan suspender el encuentro y convocaron a un bloqueo de la vía La Paz-Oruro, que fue levantada por la Policía después del mediodía. El Presidente de YPFB los convocó a una reunión para las 16.00 horas en la planta de Senkata, en la ciudad de El Alto, pero el encuentro no se pudo desarrollar debido a algunos incidentes en el ingreso a ese centro logístico.

Las medidas de seguridad, que se implementan en Senkata, y los protocolos que se aplican para el ingreso de personas evitaron que los dirigentes del transporte ingresen a las instalaciones de la planta, lo que molestó a los dirigentes quienes decidieron abandonar estas instalaciones antes de la llegada de Armin Dorgathen.

La autoridad invitó a los dirigentes a sostener una reunión con todos los delegados en los espacios abiertos que tiene la planta, pero esto no fue aceptado por los transportistas. Dorgathen mostró a los periodistas que se encontraban en el lugar cómo se carga y transporta el diésel desde esta planta a las diferentes estaciones de servicio en el departamento de La Paz.

Informó que diariamente se despacha alrededor de 1.800 metros cúbicos de diésel de la planta de Senkata y que el combustible se encuentra almacenado en los tanques para transportarlos a medida que van llegando los camiones cisternas. Espera que con la llegada del combustible desde Chile se regularice la distribución en las estaciones de servicio de todo el país.