• Seguridad
  • Carmen Challapa

Conforme avanza la investigación para esclarecer el asesinato de cinco personas en Pucamayu (Cochabamba) nuevos indicios salen a la luz. El examen forense estableció que cuatro personas fueron ejecutadas con un disparo en la cabeza después de ser sometidos a torturas. La quinta víctima habría sido enterrada viva en una población alejada.

Días antes de la intervención de la Policía y el Ministerio Público, personal de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) se trasladó a la zona con el objetivo de rescatar a los cinco retenidos, pero los uniformados fueron emboscados por los pobladores, un grupo especializado de la Policía tuvo que rescatar a sus camaradas para evitar que sean victimados.

Lurwin Ledezma, abogado de una de las víctimas explicó que en las comunidades dePucamayu y Coranipampa existe gran cantidad de fábricas de cocaína, fosas de cristalización y maceración de cocaína. “No se trata de un caso de tráfico de armas, estamos hablando de tráfico de cocaína”, apuntó.

Intervención de la Felcn

El fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina, explicó que personal de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) debe realizar actividades de interdicción en la localidad, donde se evidenció la presencia de plantaciones de marihuana.

“Una de las hipótesis posibles es que podría tratarse de un tema de narcotráfico, no estamos desechando ninguna posibilidad”, refirió.

El representante del Ministerio Público indicó que hasta el momento no cuentan con elementos que apunten a un tráfico de armas, solo la declaración del principal autor del hecho.

Allanamientos y aprehensiones 

Tejerina informó que cuentan con cinco órdenes de aprehensión más que serán ejecutadas por personal de la fuerza anticrimen. 

La autoridad refirió además que realizan diferentes allanamientos y otros actuados investigativos para esclarecer los cinco asesinatos.

“Hay personas que no quieren coadyuvar, entonces lo que corresponde es sentar presencia como Estado”, manifestó.

Declaración de uno de los autores

El autor confeso refiere que en el vehículo en el que llegaron las víctimas a Pucamayo, las trasladaron hasta el río Tizón Mayu para quitarles la vida. “Primero saqué del vehículo a Tadhashy L. M., y le disparé en la cabeza, después sacamos a las otras tres personas y también les disparé en la cabeza después les amarramos y les volvimos a subir al vehículo rojo, les echamos gasolina y les quemamos”, señala la declaración.

Cristian S., habría logrado escapar de sus captores, pero lo encontraron durmiendo cerca de plantaciones de plátano, donde decidieron enterrarlo vivo.

Según el sindicado, la población habría decidido quemar vivos a las cinco víctimas porque se trataría de funcionarios militares y existía rencor contra ellos por la intervención en los puntos de bloqueo en la localidad de Parotani.