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- EFE
22/1/2025.- El Gobierno de Estados Unidos inició este miércoles el despliegue de 1.500 militares adicionales en la frontera con México, con el objetivo de reforzar la seguridad y apoyar en las labores de deportación de más de 5.000 migrantes detenidos. Este movimiento responde a la orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump, quien busca cumplir su promesa de fortalecer el control de la frontera sur. Las tropas realizarán labores logísticas y administrativas, sumándose a los efectivos ya desplegados en la zona.
El Pentágono también anunció que proporcionará transporte aéreo militar y comenzará la construcción de barreras físicas temporales y permanentes para reducir cruces ilegales. Estas acciones representan un incremento del 60% en la presencia militar en la frontera desde el inicio del segundo mandato de Trump. Según la Casa Blanca, estas medidas son una prioridad nacional y forman parte de los compromisos de campaña del presidente.
El secretario de Defensa en funciones, Robert Salesses, aseguró que las fuerzas armadas no asumirán tareas policiales directas, en cumplimiento de las leyes que limitan su participación en funciones civiles. Sin embargo, Trump evaluará en los próximos meses la posibilidad de invocar la Ley de Insurrección de 1807 para ampliar sus capacidades en la frontera. Este despliegue marca un nuevo capítulo en la política migratoria de Estados Unidos, reforzando su postura sobre la seguridad nacional.