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Lo comparan con Luis Arce Gómez, le recuerdan que las Fuerzas Armadas no deliberan, además califican de peligroso al comandante del Ejército, Juan José Zúñiga, debido a que el jefe militar advirtió de que hará respetar la Constitución Política del Estado en lo referente a la reelección presidencial e incluso dijo que recurrirá a la fuerza para que se cumpla lo establecido en la Carta Magna.

“No creo que lo sea, legalmente está inhabilitado (Evo Morales). La Constitución Política dice que no se puede ser (Presidente) más de dos gestiones y el señor ha sido más de tres, cuatro gestiones, re reelegido. El Ejército y las Fuerzas Armadas tienen la misión de hacer respetar y hacer cumplir la Constitución Política del Estado. Ese señor no puede volver a ser más Presidente de este país”, afirmó el jefe militar entrevistado por un canal televisivo de Santa Cruz.

Estas palabras fueron cuestionadas por el defensor del Pueblo, Pedro Callisaya Aro, quien a través de sus redes sociales expresó que las Fuerzas Armadas no participan en política.

“Los artículos 245 y 246 de la CPE señalan que las Fuerzas Armadas no deliberan, ni se inmiscuyen en asuntos políticos, por lo que es imperativo su cumplimiento y respeto en un E|eee33e^stado democrático”, escribió en la red social X.

El diputado del ala radical del MAS, Héctor Arce Rodríguez, comparó esta actitud con lo hecho en la dictadura de Luis García Meza y Luis Arce Gómez.

“Esto a mí me recuerda el golpe de Estado de 1980, del general García Meza o Luis Arce Gómez, que era su ministro y dijo que anden con su testamento bajo el brazo. Es una amenaza frontal a los líderes políticos que hoy sí están facultados para hacer política”, sostuvo.

Agregó que “esta amena-za que ha hecho el general Zúñiga, para mí, es altamente peligrosa y tenemos que cortarla de raíz y si él quiere hacer política, está en su derecho, pero debe dejar las Fuerzas Armadas”.

RESPETO

En ese contexto, el presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico Rodríguez, señaló que las declaraciones del Comandante del Ejército, que sugieren una defensa armada de la Constitución, son inaceptables y contrarias a los principios de la democracia boliviana.

“Exigimos respeto absoluto a la Constitución y a la democracia. Las Fuerzas Armadas deben cumplir su rol sin injerencia política. Cualquier intento de influir en el proceso democrático es una amenaza grave a nuestra libertad y estabilidad”, refiere en su cuenta de Facebook.

Por: Wilson Aguilar