• Economía
  • Gregory Beltrán

La ciudad de La Paz vivió ayer una jornada caótica por las protestas de los comercializadores de carne, quienes protagonizaron una marcha desde la ciudad de El Alto, además de realizar bloqueos en algunas calles y el cierre de mercados, todo por el incremento del precio de las tres principales carnes que se consume en Bolivia. 

Los manifestantes demandaron que se suspenda las exportaciones de estos productos y anunciaron que en las próximas horas sostendrán una reunión nacional para determinar si radicalizan sus medidas. 

En tanto, los choferes paceños, como la Federación de Transporte Libre y el Sindicato de Choferes Chuquiago Marka, decidieron ir a un paro de 24 horas este miércoles por la escasez de combustible, además de la subida de precios de la canasta familiar y de los insumos, como los repuestos, llantas, servicios y otros que emplean.
despeje de vías.

La página de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) contabilizó la tarde de ayer 18 puntos de bloqueo, la mayoría de ellos se concentraban principalmente en el departamento de Cochabamba. También se reportaron dos cortes en Santa Cruz y similar número en Oruro, mientras efectivos de la Policía impidieron que prosperen varios cortes de ruta en distintas regiones del país. 

Por ejemplo, la madrugada de ayer los policías intervinieron intentos de bloqueos en la ruta al Chaco, en Tarija, al igual que en Caracollo, en la carretera La Paz-Oruro, y en Caranavi.

En el caso de la ruta La Paz-Oruro se procedió a detener a cuatro personas afines al dirigente cocalero Evo Morales, entre ellos a una mujer que portaba 4.000 bolivianos. 

“Tenemos cuatro personas que han sido arrestadas, una de ellas es una persona de sexo femenino que además portaba 4.000 bolivianos en cortes de 100”, informó el comandante departamental de la Policía de Oruro, Gonzalo Torrico.

PEDIDO

La ilustre Confederación del Transporte Pesado demandó atención médica en los puntos de bloqueo y advirtieron con no pagar peajes durante un mes por los perjuicios de los bloqueos y rechazaron la venta del diésel ULS, que YPFB comercializa en las plantas de almacenaje a 6,88 bolivianos el litro por no consensuar con el sector.

CONSECUENCIA

La falta de combustible generó la especulación en las tarifas del transporte, principalmente urbano, por lo que el viceministro de Defensa de los Derechos del Consumidor, Jorge Silva, advirtió que los choferes que suban el precio del costo de pasajes en el servicio público se exponen a procesos penales y anunció que solicitará a la ATT realizar los controles respectivos.

Sobre el paro de los carniceros dijo que es una medida “innecesaria y perjudicial, toda vez que hay un acuerdo que se firmó el 7 de octubre en Santa Cruz”, donde los dirigentes de este sector acordaron varias medidas, algunas de las cuales ya se atendieron, además que se establece revisar su cumplimiento cada 30 días. 

Si bien está de acuerdo en revisar la exportación de carne de res, asegura que se lo debe estudiar con las autoridades competentes, además que “el tema del contrabando no se va a solucionar cerrando los mercados, más bien es jauja para los contrabandistas que en vez de dejar la carne se lo llevan a las fronteras gracias a que los mercados están cerrados”.

Respecto a la escasez de combustibles la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) informó que se empezó ayer a regularizar su distribución, luego de que se permitiera la llegada de cisternas desde Chile. 

Se espera que la distribución en las estaciones de servicio se regularice en los próximos días siempre y cuando se deje pasar a los vehículos. “Si bien estamos con filas en las estaciones de servicio, estos están avanzando porque el combustible está garantizado en estas 10 estaciones de servicio de La Paz y 10 en la ciudad de El Alto”, dijo su director, Germán Jiménez.

RIESGO

Los productores de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) advierten el riesgo de la campaña más importante de la agricultura debido, principalmente, a la falta de combustibles. En conferencia de prensa, el presidente de esta instancia, José Luis Farah, dijo que su sector requiere 90 millones de litros de diésel y si no tienen un normal abastecimiento están en peligro todos los productos que producen.

A la falta de combustibles se suman los bloqueos y la falta de dólares por lo que el sector se declaró en estado de emergencia y requieren principalmente diésel para la campaña de verano antes del 31 de diciembre.

Farah explicó que en su momento advirtieron que la importación directa de combustibles no era la solución y que ambos problemas son responsabilidad del Gobierno. Tanto la falta de combustibles como la falta de dólares, al igual que mantener las vías expeditas, señaló que es responsabilidad del Ejecutivo y no de su sector, por lo que cualquier problema recae en ellos.