Los penales fueron el mejor aliado de Chile para conseguir no solo su primer título en la Copa América, en 2015, sino también el segundo y en forma consecutiva, un año después (2016) en el torneo Centenario jugado en Estados Unidos por primera vez.
En los dos torneos, casualmente se encontró con Argentina en la final y la definición fue por la vía de los penales.
En 2015 el partido terminó sin goles y desde los 12 pasos Chile venció 4-1. En 2016, la final también acabó en blanco, pero en la definición de penales la selección chilena volvió a vencer, esta vez 4-2.
Esas selecciones de Argentina tenían a Lionel Messi como capitán, pero Chile irrumpió en esa década con una generación dorada liderada por Arturo Vidal y Alexis Sánchez, que le dio grandes alegrías al fútbol de ese país.
LA COPA EN CASA
La Copa de 2015 fue la cuadragésima cuarta edición. Chile fue sede por séptima vez entre el 11 de junio y el 4 de julio. Participaron las 10 selecciones de la Conmebol y dos invitados de la Concacaf, México y Jamaica.
Chile estuvo en el Grupo A junto con Bolivia, Ecuador y México. Terminó primero en la fase inicial con 7 puntos y en el último partido goleó 5-0 a Bolivia, que igual se clasificó como segundo con 4.
En Santiago, en cuartos de final, Chile venció 1-0 a Uruguay, en semifinales se impuso 3-1 a Perú (el clásico del Pacífico) y se instaló en la final.
Argentina, por su lado, ganó el Grupo B (donde estaban Paraguay, Uruguay y Jamaica). En cuartos de final superó a Colombia en penales (5-0) y en semifinales se sacó de encima a Paraguay con una goleada (6-0).
La final tuvo muchas opciones de gol, pero terminó 0-0. Y en penales, Chile fue más efectivo: 4-1. Todo el país vibró con el título porque era la primera vez que conquistaba la corona de la región.
SIGUE LA FIESTA
Al año siguiente la Conmebol programó la Copa América Centenario y la sede se la dio a Estados Unidos. Era la primera vez que el torneo salía de Sudamérica.
El torneo se jugó del 3 al 26 de junio. Participaron 16 selecciones. A las 10 de Sudamérica se sumaron Costa Rica, Haití, Jamaica, Panamá, México y el anfitrión.
Otra casualidad, Chile y Argentina coincidieron en el Grupo D junto con Panamá y Bolivia. Argentina se clasificó primero con una campaña perfecta (9 puntos) y Chile segundo (6).
En cuartos de final, la Albiceleste eliminó a Venezuela (4-1) y en seminales sacó del camino a Estados Unidos con una goleada (4-0). El equipo de Messi estaba para alcanzar el trofeo.
Pero Chile tenía un gran equipo, que además defendía el título ganado el año anterior. Tal era su poderío que se deshizo de México en cuartos de final con una paliza (7-0) y en las semifinales derrotó 2-0 a Colombia para instalarse en la final.
Los expertos decían que a esa final llegaba una Argentina que tenía un combinado de estrellas con Messi como estandarte, pero Chile era un equipo. Lo segundo prevaleció en la final. Chile ganó 4-2 en los penales en una jornada en la que incluso Messi erró un lanzamiento.
La Prensa
